lunes, 28 de febrero de 2011

Vuelve el Villablog

Después de un año de parón, vuelve este evento que tanto éxito tuvo en 2009 en Rociana del Condado. Este año, el II Villablog Comarca de Doñana, se celebrará el sábado 9 de abril. Yo no podré asistir, pero os invito a que si podéis os acerquéis a este bonito pueblo del condado de Huelva y disfrutéis de su gente, de su gastronomía, y de paso reforcéis con las conclusiones que de allí se saquen vuestro rinconcito de internet. Para ir abriendo boca, os pongo el programa de este año.

9:00 – 10:00 Recepción y Desayuno.

A partir de las 9 de la mañana se procederá a dar la bienvenida y el material en el salón de la planta baja del Casino. Habrá un servicio de desayuno que se servirá después de la acreditación. En la recepción también se procederá a inscripción de las personas en cada uno de los talleres de ACD y del centro Guadalinfo que en principio son: móviles, cámaras fotográficas, wii, libro electrónico, nintendo ds, gps, creación de un blog.

10:00 – 10:30 Presentación

En el acto de presentación estarán en principio (con breves intervenciones)
Consejero de Medio Ambiente
Alcalde de Rociana
Diputación
Delegada de NNTT
Universidad
Andalucía Compromiso Digital

10:30 – 12:00 Medio Ambiente y TICs

12:00 – 12:30 Receso

12:30 – 13:00 Discapacidad y TICs

13:00 – 14:00 Talleres

Se realizarán en la planta 1ª del Casino y en el centro Guadalinfo y versarán sobre: móviles, cámaras fotográficas, wii, libro electrónico, nintendo ds, gps, creación de un blog.

14:00 – 16:00 Almuerzo

16:00 – 18:00 PueBlog

El pueblog este año partirá del Casino, recorrerá la Calle Sevilla, entrará en algunas casas señoriales, luego para la cooperativa del vino, después Lujovi (cooperativa de fresas) y por último Bodegas Contreras (vino).

18:00 – 19:00 Merienda

19:00 – 20:00 Clausura

20:30 – 24:00 Ruta de la Tapa

Para más información e inscripción, visitad la página del evento, www.villablog.es. Los usuarios de twitter, podéis seguir todo sobre este evento con la etiqueta #villablog2011.

jueves, 17 de febrero de 2011

Alma periodista

Llevo varios días con ganas de entrar en este apartado del blog, con ganas de sentir esa sensación del folio en blanco que poco a poco, trazo a trazo, (en este caso golpe a golpe de tecla) se va llenando. El martes fue un gran día para mi. Al fin, en el tablón de notas correspondiente, aparecía la calificación que faltaba, la que me ha convertido en un licenciado más. Un licenciado más y quizá un estudiante menos. No puedo negar que al principio, me costó tomar conciencia de ese esperado paso. Podéis llamarme frío, pero yo pensaba que lo iba a celebrar menos pues he pensado más de una vez, que después de tanto tiempo en la carrera, ya no es tan ilusionante el licenciarse. Quizá por eso, digo que soy licenciado a medias, pues todavía falta por arreglar los papeles que me darán ese ansiado resguardo con el que iré por primera vez en mi vida, buscando un trabajo que me permita realizarme como persona, demostrar que soy capaz de hacer las cosas como los demás a pesar de que estoy de lo mío y seguir aprendiendo a la vez que amando esta profesión que elegí hace ya tantos años.

Pensaba que me iba a hacer menos ilusión pero en estos días, estoy encantado de celebrarlo con todos los que han estado ahí desde un principio apoyándome. Encima, el clima ha ayudado a que las ganas de celebración sean mayores. La frase que más he escuchado en estos días, ha sido "estoy muy orgulloso de ti", a lo que uno por vergüenza, siempre se queda a punto de decir, "más orgulloso estoy yo de que compartas conmigo esta alegría, este fin de etapa, este regalo anticipado de cumpleaños a mi madre que desde su rinconcito, lo festejará como cuando supo que era abuela". Es una alegría el saber que no estás sólo, que cuando las fuerzas flaquean puedes pensar que aunque no sea por ti, debes seguir adelante por los demás. Inmediatamente, cuando las energías vuelven, vuelves a creer en ti y con el discreto impulso de los demás, todo es más llevadero. Dice el refrán, que "las penas compartidas son menos penas", y en estos días he podido comprobar una vez más, que las alegrías compartidas son más alegrías. Quiero agradeceros desde aquí a todos vuestro apoyo sincero y como todo no es perfecto, pedir perdón si en algún momento no he estado a la altura. Ahora, una vez alcanzada esta meta, toca seguir adelante, algo que se hace con mucho gusto pues sobre todo, creo en mi y en que puedo conseguirlo.

martes, 8 de febrero de 2011

Historia real ocurrida hace 365 días

Era lunes, 1 de febrero. Mientras picaba algo en casa de un gran amigo el teléfono sonó. Era un número oculto; ¿Lo cojo? "bueno, de la universidad suelen llamar con número privado". Al otro lado, me informaban que había sido seleccionado para unas prácticas en Canal Sur Radio.. Inmediatamente, aquél día cambió de color. Casi que también inmediatamente, cancelé los trámites que estaba haciendo para entrar en un periódico. Hasta el lunes siguiente, los días pasaron sin nada reseñable que contar. Por fin, llegó la hora.

Mientras iba en el autobús, pensaba que estaba a punto de lograr la gran meta que me marqué hace tiempo en la carrera. Me marqué otras menores que no se cumplieron, pero en cambio otras algo mayores en las que pensé menos, si las alcancé. La rampa del puente de la varqueta empezaba a notarse y a la vez, mis nervios crecían. ¿Y ahora como entro yo si en esta parada no suele bajarse nadie?. Al momento, percibí que no iba a bajar sólo lo que nunca pensé, es que María y yo íbamos al mismo sitio y que María, era conocida de la facultad. Es de esas personas que por su forma de ser, a pesar de haberlas visto una vez no te olvidas de ellas.

Había pasado varias veces ese arco de seguridad, y por qué no decirlo, había soñado pasar por él muchos días seguidos. Y así sucedió. Tras una breve espera, pasamos al despacho de la jefa de informativos. En la radio, sonaba un anuncio que quizá será antológico cuando pase el tiempo como aquél de "muebles Manuel Espejo en Puente Genil los mejores precios de todo el país....", muy recordado en el centro de Andalucía. El anuncio en cuestión, era el de supermercados el Jamón. No recuerdo la oferta de aquella semana, pero no me extrañaría que fuera la cinta de lomo fresca a 3,79€ el kilo. La recepción y la asignación fue rápida. De aquél momento, conservo y espero no p'erder mi tarjeta de fichar, que fue la única que tuvo que hacerse con papel reciclado quizá, porque a mi me la hicieron el último. Tras una breve vuelta a casa para comer, retornamos al pabellón de Andalucía. En la vacía redacción de deportes, lugar que sería mi casa laboral durante los próximos 6 meses, el oyente pasó al otro lado del receptor. Allí estaba David Gallardo, un tío grande en todos los sentidos. Lo que sucedió después o algo parecido, ya lo narré en otra página anterior de este cuaderno. Recuerdo con cariño aquél día. Eso sí, hay una cosa que no me gusta tanto recordar, que no es otra que los lógicos nervios de los primeros momentos de trabajo. Aquella inseguridad, afortunadamente duró poco gracias al apoyo de aquellos que tanto me aguantaron y que en poco tiempo, pasaron a ser mucho más que compañeros.

Un año después, estoy en puertas de poder cerrar mi expediente académico convirtiéndome al fin, en un licenciado en periodismo. Mi sueño está cerca de cumplirse y ese sueño, quizá si no os hubiera conocido, no se abría cumplido con la misma ilusión. Empezásteis siendo mis compañeros, sois mis amigos y lo mejor de todo, mis maestros. Gracias por todo lo aprendido en aquél tiempo que hoy recordamos y gracias, por seguirme enseñando cada día, como se inventa la buena radio cada día.